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3 de los 7 "Jotitas" que arribaron ayer serian promovidos al primer equipo blanquiazul. Reimond Manco, Eder Hermoza y Alonso Bazalar tendrian su oportunidad con la divisa aliancista.

Cuando Carlos Franco asumió interinamente la presidencia de Alianza Lima coincidió con el inicio de la debacle íntima. El resultado catastrófico ante Deportivo Universidad San Martín contrastaba con la exitosa campaña que la Sub-17 realizaba en tierras coreanas por esos días. No pasaron muchos días para que Diego Aguirre dejase el cargo ante la situación insostenible. Y si de algo se habló mucho en los días posteriores a su caída fue del necesario "cambio generacional".

Ya con los seleccionados aliancistas en Lima esta idea se concreta, más aun con el arribo de Miguel Angel Arrué. El amistoso frente a la Universidad Nacional de Pucallpa el 12 de setiembre (fecha Fifa) se perfila como el punto de quiebre en el estructuramiento del nuevo equipo grone. Allí se pondrian profesionalmente por primera vez las sedas blanquiazules Alonso Bazalar y Eder Hermoza -recordemos que Manco debutó en el Apertura contra Alianza Atlético- quienes son para la directiva los elementos con mayor proyección.

Por lo cual, la directiva ya viene gestionando los futuros contratos profesionales de sus 7 "Jotitas", para evitar que los mismos emigren sin dejar rédito económico ni futbolístico alguno al club que los vio nacer deportivamente. Aparte de los ya mencionados son también jugadores de Alianza Jairo Hernández, Jersi Sócola, Ernesto Salazar y Luis Trujillo.

Pucallpa será testigo del nacimiento de esta nueva camada de "potrillos", como recordando a aquellos que se nos fueron el 1987 tras jugar un partido en esta ciudad.